Bienvendos a "Un bosque mediterráneo en el corazón de la ciudad"

El Departamento de Ciencias te da …..La Bienvenida

Con el proyecto “Un bosque mediterráneo en el corazón de la ciudad” te animamos a conocer el entorno natural de tu ciudad y de tu Comunidad. Te asombrará comprobar la gran diversidad de seres vivos que hay en él. Seguramente conoces muchos de ellos pero ni te has parado a pensarlo. Queremos que aprendas a diferenciarlos. En concreto en nuestro invernadero vamos a cultivar algunas especies vegetales de este bosque. Las cuidarás, conocerás las condiciones que necesitan para sobrevivir, la importancia que tienen en el ecosistema del que forman parte, la utilidad que tienen para el ser humano, su uso ornamentalBienvenido a nuestro bosque

jueves, 18 de noviembre de 2010



El Pinsapo o Abeto español. 
Abies pinsapo, el pinsapo o abeto español, es una especie arbórea del género Abies, perteneciente a la familia Pinaceae y de distribución directamente emparentada con el bosque mediterráneo. Está emparentado con otras especies de abetos de distribución mediterránea.

La clasificación científica del pinsapo es:
Reino
Plantae
División
Pinophyta
Clase
Pinopsida
Orden
Pinales
Familia
Pinaceae
Género
Abies
Sección
Picea
Especie
A. pinsapo

En nomenclatura binomial, el abeto sería Abies pinsapo. Según la clasificación de estados de conservación de especies, el pinsapo esta considerado una especie amenazada, aunque no de las más preocupantes. El gráfico de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y los  Recursos Naturales así lo revela:
Localización

Los bosques naturales de esta especie (denominados pinsapares) únicamente se localizan en determinados puntos de las Sierras de Málaga y Cádiz, en el extremo occidental de la cordillera Bética y en el Rif marroquí, aunque algunos autores consideran al abeto marroquí una especie diferente (A. maroccana). Además, se encuentra asilvestrado en otros lugares como Sierra de Santa Cruz, Orcajo, (provincia de Zaragoza), Sierra de Huétor (provincia de Granada), etc.

La mayor parte de los pinsapares españoles se encuentran en áreas protegidas bajo alguna figura legal: Parque Natural de la Sierra de las Nieves y Paraje Natural de los Reales de Sierra Bermeja, en la provincia de Málaga, y Parque Natural Sierra de Grazalema en la provincia de Cádiz.

Descripción

Se trata de un árbol alto, en ocasiones más de 30 m, de porte elegante que, en algunos ejemplares viejos se torna retorcido o dividido en varios brazos. Corteza fina, gris claro, con grietas oscuras de poca profundidad. Hojas gruesas, de sección subcuadrangular, de color verde oscuro y con bandas estomáticas blancas apreciables en ambas caras. Su base se ensancha como una ventosilla y suelen durar hasta 12 años en la rama.

Los conos masculinos se encuentran en la periferia de la copa, de color rojo púrpura, excepcionalmente amarillos. Las piñas son grandes, erguidas, situadas en la parte superior de la copa, y cuando maduran se deshacen para liberar los piñones, dejando caer al suelo unas piezas con dos escamas pegadas.

Hábitat

Los bosques peninsulares de esta especie se encuentran entre 1000-1700 metros de altura sobre el nivel del mar. Son formaciones puras o mezcladas en menor medida con quejigos, arces o pinos. El pinsapo requiere unas condiciones de temperatura no muy extremas, con veranos frescos e inviernos fríos, con elevadas precipitaciones en primavera y nieblas frecuentes en otoño y primavera, y una cierta humedad en verano, pudiéndose clasificar este clima como submediterráneo de montaña húmedo.

Los pinsapares se desarrollan con todo su esplendor en las zonas de umbría, no faltando en solanas, aunque en este caso son bosques más claros. Esta especie es indiferente al sustrato, creciendo tanto en suelos calizos como de
peridotitas.

Usos y conservación

Los pinsapares tienen un elevado valor paisajístico y científico. A pesar de la protección de que gozan estos bosques, aún son muchas las amenazas que se ciernen sobre ellos: incendios provocados, proyectos urbanísticos, erosión, falta de regeneración por sobrepastoreo, exceso de visitantes incontrolados, etc.

El pinsapo fue descrito para la ciencia por el botánico suizo Pierre Edmond Boissier, en su obra Voyage botanique dans le Midi de l´Espagne (Viaje botánico por el sur de España), 1838.

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